El Arte del Péndulo y La Bola de Cristal

   Hay dos métodos fundamentales en la adivinación mediante cristales, usando un péndulo o una bola de cristal. Los cuidados de ambos cristales son muy importantes, no se debe permitir que nadie excepto el dueño del objeto lo toque, hay que lavarlos frecuentemente con vinagre y agua, no exponer los objetos a los rayos del sol, en cambio los rayos de la luna producen efectos excelentes en estos objetos, y guardarlos en un paño negro.

   La radiestesia es el arte de emplear el péndulo para la adivinación. Antiguamente, antes de que descubrieran el arte de la radiestesia usaban la coscinomancia, en el cual empleaban un cedazo o una criba. Posteriormente comenzaron a usarse otros objetos como anillos y llaves entre otros. En la actualidad todos estos métodos se siguen utilizando, pero la radiestesia es una de las mas utilizadas.
La adivinación mediante el péndulo es una de las mas utilizadas por su sencillez y la gran variedad de usos distintos que se le puede aplicar. El péndulo por si solo no sirve de nada, solamente es un instrumento perceptor que canaliza nuestro subconsciente y que mediante los diferentes movimientos del péndulo podemos interpretar una cosa u otra. Hay una gran variedad de péndulos, con diversas formas y materiales. Suelen estar hechos en cristales de cuarzo, no obstante te pueden encontrar fabricados con diversas piedras semipreciosas.
   A parte de utilizarse como método adivinatorio cámbiense usa para canalizar las energías de las habitaciones, evaluar los distintos chakras y numerosas posibilidades mas. Para usar este tipo de arte es recomendable poseer una mente abierta que permita actuar libremente a nuestro subconsciente y capaz de no manipular el resultado a su antojo.
   El péndulo se usa sujetando el extremo opuesto de la cadena que lo sujeta y mantenerlo totalmente inmóvil. Cuando se ha conseguido mantenerlo fijo en un punto es cuando se debe pensar la pregunta que realizarle y concentrarse en el péndulo. En ese momento se empezara a mover y según la dirección que toma la respuesta será una u otra. Si gira en el sentido de las agujas del reloj, la respuesta a la pregunta será un sí, por el contrario si gira en sentido contrario a las agujas del reloj, la respuesta será un no. Si en lugar de girar en círculos gira en sentido vertical, la respuesta es un sí, en cambio si gira en sentido horizontal, la respuesta es un no.
   Otro de sus usos mas frecuentes es buscar personas u otros datos de interés en un mapa o plano. Para ello, se coloca el plano en la mesa, dicho plano debe de estar cuadriculado y dividido por secciones. Sujetamos el péndulo por cada cuadricula del plano y se preguntara en cada una de ellas si es en esa en la que se encuentra lo que deseamos buscar. Según como se mueva sabremos cual es la respuesta.

   La bola de cristal existe desde el siglo V. Este arte recibe el nombre de cristolomancia. Eran usadas especialmente por las tribus celtas, concretamente los druidas, no obstante su practica comprendía todos los territorios europeos, en otras culturas y pueblos, como los mayas, incas, indios americanos, tribus de Borneo, Nueva Guinea, Madagascar y los aborígenes australianos.
   Anteriormente a la aparición de las bolas de cristal, utilizaban para este arte otros objetos, cristales, espejos, metales pulidos y recipientes con agua. En la antigua Grecia leían las aguas de una fuente que consideraban sagrada, como la fuente de Castalia que se encuentra en el oráculo de Delfos, uno de los mas importantes de Grecia. El profeta Nostradamus usaba este arte mediante un cuenco de agua colocado en un trípode de latón. En el antiguo Egipto usaban esferas cilíndricas para este tipo de adivinación, sin embargo también usaban la interpretación de los reflejos en el agua.
   El arte de la clarividencia mediante las bola de cristal requiere muchas practica y paciencia. Los cristales de roca son excelentes en este arte, sin embargo el cristal de cuarzo también es eficaz. Hay varios pasos a seguir a la hora de proceder a este tipo de lectura, como colocarse de espaldas a cualquier tipo de luz, coger la bola y colocarla sobre un soporte, el cual debe de estar cubierto por un paño negro. Dejar la mente en blanco, mirar la lejanía dentro de la bola sin fijar la atención en ningún punto fijo. En ese momento deberíamos de ver imágenes, las cuales con la ayuda de libros o con la practica continuada del arte de la cristolomancia llegaríamos a interpretar sin ningún tipo de ayuda.

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